miércoles, 21 de mayo de 2008

PALABRAS DE UN RECUERDO

Hoy nos hemos reunido para celebrar que hace cincuenta años se unieron por poderes, en la distancia y sin Internet, Mª Nieves y Amadeo.

Venezuela y La Palma alargaron sus brazos y entrelazaron sus manos para que comenzara una historia de amor que nosotros, sus hijos, heredamos con alegría, y que en estos momentos recordamos y festejamos.

Queremos de todo corazón darles las gracias por existir y celebrar que de esta unión ya somos veinte, entre naturales y “piojos pegados”.

Recordamos con cariño las bodas de oro de nuestros abuelos maternos, parece que fue ayer y… ¡hoy estamos celebrando las bodas de oro de nuestros padres!

El tiempo pasa y pasa, y en la medida que transcurre, lo valoramos como agua en tiempo de sequía.

¿Cómo se pueden resumir cincuenta años de casados, en apenas unas líneas?, la tarea es harto complicada, pero no por ello hemos renunciado a hacerlo.

Por ejemplo recordar aquellas tardes cuando regresábamos de excursión y el eterno dilema de si pararíamos o no, en “Casa de Santiago” a ¡comprar churros! Que provocaba la épica frase “churros cha, cha, cha”, y no habremos olvidado las chocolatinas que papá traía del bar., y aquel instrumento infernal, que mamá esgrimía cuando alguno de nosotros se enfermaba, aquella jeringuillas de cristal hirviendo en un caldero lleno de agua para que se desinfectaran…, y que me dicen de los cursillo intensivos de natación en los Cascajos, salías nadando porque ¡dios quería!

Insistente como nadie, mamà y la lectura, cansina cantinela que ahora se hace eco en nuestros hijos reflejando la atemporal tarea de educar.

Mis recuerdos se remontan en un abanico de olores perdidos en el tiempo , aromas a calamares fritos , allacas , arepas , flanes y bizcochones caseros, tiempos de leche en polvo , pan de manteca , recortes y un sin fin de sensaciones culinarias que hoy recuerdo con cariño.


La carta y la albarda se mezclan y conviven durante 50 años
salvando mil obstáculos que la vida les presenta.

Llegan tiempos de calma y disfrute, de recoger la cosecha con tanto sacrificio sembrada.

Darles la enhorabuena y agradecerles de todo corazón por estar siempre ahí, siendo siempre el buque insignia de esta particular flota.

¡ FELICIDADES!

1 comentario:

indiano dijo...

Estas fueron unas palabras que se escribieron para leer en el aniversario pero por desajustes en el protocolo no se leyeron.
Las cuelgo por si alguno no se entero que las tenga.
Un saludo.